¿Te has planteado cambiar a la iluminación LED?
En JIOrings conocemos bien la importancia de darte siempre lo mejor, y por eso tratamos de cuidarte en todos los aspectos. Y como siempre estamos pendientes de mejorar continuamente, sabemos que además de a los clientes, también debemos cuidar del medio ambiente.
Por desgracia, nuestro planeta está en peligro y los efectos de la contaminación pueden agravarse si no tomamos cartas en el asunto. Ser responsables en este aspecto implica pequeños esfuerzos de beneficios inmensos. La clave principal está en el ahorro y el saber que los recursos son limitados para actuar en consecuencia.
Por ello, en JIOrings nos hemos comprometido a cambiar toda nuestra instalación de iluminación tradicional al sistema basado en los diodos emisores de luz, conocidos como LEDs.
Parece un cambio sin mucha importancia pero, con este paso dejaremos de emitir anualmente 2 toneladas de CO2, una cifra más que considerable.
En este sentido y con medidas de este tipo, cualquiera puede aportar su granito de arena. Y de hecho la clave está en la concienciación y en ir sumando granitos de arena que contribuyan a reducir la contaminación. Es cierto que quizá no se pueda reforestar el Amazonas, pero con muy poquito se puede ayudar al planeta.
En JIOrings, analizamos el consumo y el impacto que tenía nuestra iluminación convencional y con los datos en la mano, no dudamos en invertir en el cambio a LED para: ahorrar en energía, respetar más al medioambiente, reducir nuestras emisiones de CO2, contar con una tecnología que se adapta a nuestras necesidades, contar con una iluminación que tienen una vida útil de 50.000 horas (frente a las 2.000 horas de una bombilla estándar).
Con gestos tan simples como estos, todos podemos colaborar a que nuestro planeta sea un lugar mejor. Nosotros seguiremos buscando nuevas formas de ayudar al planeta, por eso queremos destacar, que la larga vida útil de la tecnología LED repercute directamente en el ahorro y reduce la contaminación, solo por estas dos ventajas hay que animarse a hacer el cambio.