Isaak Rosillo en el paraíso del enduro
Cuando alguien viene y te cuenta que va a hacer enduro en Nepal y ese alguien, además, es Isaak Rosillo, solo puedes hacer dos cosas: alegrarte y apoyarle.
Alegrarte es fácil, solo hace falta ver el brillo de sus ojos al contar los detalles del viaje para comprender que está a punto de cumplir un sueño. El 31 de octubre partirá hacia Nepal, a realizar enduro por algunos de los descensos más espectaculares que existen. Los primeros 2/3 días le servirán como primer contacto con el país, sus gentes, sus costumbres, conocer la capital y poco a poco ir poniendo la bici en orden y empezar con la aclimatación al medio y a la altura. Esto será vital para poder en los días posteriores realizar y disfrutar de los descensos que le esperan.
Apoyarle también lo es, desde JIOrings vamos a colaborar con esta aventura con la aportación de ropa deportiva casual y ropa de enduro para los descensos y sufragando algunos costes de la misma.
Como la aventura no está reñida con la planificación, con la ayuda de Himalayan Single Track ha cerrado un calendario de infarto. Siempre que las condiciones externas lo permitan y su aclimatación a la altura sea satisfactoria, esto es lo que le espera:
Hoja de ruta
El lunes 4 de noviembre, llegará a unos de los paraísos del enduro, donde se celebran las Asian Enduro Series, con senderos muy técnicos y varios remontes en jeep. Tras este primer contacto, el martes le esperan 9 horas de coche y allí donde el vehículo ya no pueda seguir, cogerá la bicicleta para realizar unas dos horas de pedaleo en ascenso. Lo que le servirá para seguir aclimatando cuerpo y mente. Ese día dormirá a 2.900 metros de altitud.
El miércoles, a Isaak le esperan 6 horas de subida constante en bici para seguir aclimatando y dormir a 3.750 metros. El jueves 7, tras 2 horas de pedaleo llegará al pico Pike Peak (4.065 metros), desde donde realizará uno de los descensos más técnico que se pueden hacer, con 2.000 metros de desnivel negativo, uno de los más tops del Himalaya. Y tras este descenso y descarga de adrenalina, podrá disfrutar de 5 horas de sendero brutal por selva, para remontar hasta Phaplu a 2.469 metros.
El viernes 8 y sábado 9, los pasará por los alrededores de Phaplu, donde dormirá en un típico pueblo nepalí, compartiendo casa, comida y experiencias con una familia autóctona. Aquí pasará dos días exprimiendo cada sendero que ofrece el valle para realizar enduro, haciendo algún que otro remonte en coche, para poder ahorrar energía y disfrutar aún más si cabe de las bajadas.
Y por si acaso se ha quedado con ganas de más, tiene programado remontar el río Junb, hasta llegar al pueblo con el mismo nombre. Desde allí volverá a remontar en jeep, para hacer un descenso muy largo, con tramos colgados de acantilado, cortados potentes para terminar en un sendero interminable. Llegados a este punto, y siempre según vaya el cuerpo, tomará la decisión de subir a 5.000 metros lo que implicaría dos días más de aventura, coger una avioneta y varios remontes en jeep.
Como buena hazaña, ésta también ira in crescendo y el lunes 11 llegará el punto álgido: el descenso estrella del viaje. Todo partirá de un pueblo llamado Ringbu, punto de salida y de llegada de este gran día. Entre otras cosas, tendrá que cargar 2 horas con la bici al hombro para poder llegar al inicio del descenso. 45 minutos de bajada completísimo y con el que como el mismo Isaak comenta, con una cara de felicidad absoluta, “va a flipar”.
El martes 12 hará día en Ringbu, otro de los paraísos del enduro, donde pasará el día remontando en coche y disfrutando de los descensos sobre la bicicleta. Ya sabes, para aprovechar hasta el último minuto. Ya que el miércoles 13 una avioneta le llevará de vuelta a Katmandú, donde Isaak pondrá fin a esta aventura.
Nuestra relación con Isaak viene de largo, pero para los que no le conozcáis, pronto publicaremos una pequeña entrevista hecha con mucho amor.